Un vuelo histórico conectará China y Argentina en la ruta aérea más larga del mundo

Con una distancia de casi 20.000 kilómetros y una duración de 26 horas con una única escala técnica en Auckland, Nueva Zelanda, esta nueva ruta será la más extensa del planeta, superando a la conexión actual entre Nueva York y Singapur.

La carga como principal motor del servicio

Aunque esta ruta aérea ofrecerá el servicio de pasajeros, el verdadero sustento económico de este vuelo radica en el transporte de carga. La compañía busca canalizar la gran demanda de compras realizadas por los argentinos en plataformas de comercio electrónico chinas como Shein y Temu, que experimentaron un crecimiento exponencial en los últimos tres años, convirtiendo a Argentina en un mercado clave para el comercio digital chino.

Este volumen de paquetes, principalmente de ropa, calzado, accesorios y artículos de hogar y electrónica, había saturado los canales de transporte tradicionales, que dependían de escalas en Estados Unidos, Europa o Brasil. Con el "vuelo Shein", nombre informal que se le ha dado en el sector, China Eastern Airlines busca agilizar la entrega de mercancías, reducir costos logísticos y establecer un corredor directo para capitalizar el auge del consumo digital en Argentina.

El boom de Shein y Temu en Argentina

El éxito de Shein en Argentina se debe a su extenso catálogo y precios competitivos. La demanda no se ha visto desanimada por los tiempos de entrega, que pueden ser de varias semanas. A esta plataforma se sumó Temu, que ha crecido de manera agresiva con grandes campañas publicitarias y descuentos de hasta el 90% en algunos productos.

Se estima que millones de paquetes ingresan mensualmente al país a través del régimen de pequeños envíos internacionales, que fue flexibilizado por el gobierno de Javier Milei. Esto generó un debate sobre el impacto en la industria nacional. Mientras que gremios textiles y fabricantes locales denuncian competencia desleal, los consumidores celebran la posibilidad de acceder a productos a precios bajos en un contexto de crisis económica.

Impacto en la economía y el comercio

El arribo de este vuelo es visto como una consecuencia directa del auge de las plataformas chinas de e-commerce. Para China Eastern, el desafío es mantener la ruta, ya que los costos operativos de un trayecto de casi 20.000 km son elevados. No obstante, el potencial de la carga parece asegurar su viabilidad, ya que la bodega de cada avión puede transportar decenas de toneladas de mercadería.

Este nuevo servicio abrió un debate sobre el futuro del comercio local, con la industria nacional enfrentando una fuerte competencia. Según datos de la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI), las compras de vestimenta en plataformas del exterior representaron 408 millones de dólares en el primer semestre de 2024, lo que significa un crecimiento de casi el 260% en comparación con el mismo periodo de 2023.

Preparativos en Ezeiza y la nueva relación con China

Las autoridades aduaneras están ajustando medidas para regular la entrada masiva de paquetes, con el objetivo de asegurar el pago de los tributos correspondientes. Cualquier restricción en este ámbito enfrenta la resistencia de millones de consumidores habituados a comprar por estas plataformas.

El fenómeno también tiene un impacto en el sector aerocomercial argentino. El movimiento económico que genera un vuelo de esta magnitud en el aeropuerto de Ezeiza podría dinamizar servicios logísticos asociados, desde el almacenamiento hasta la distribución de paquetería. Aeropuertos Argentina ya ha emprendido obras de ampliación y renovación en el área de Cargas en el aeropuerto de Ezeiza, que actualmente recibe el 98% de la mercadería importada en este sector.

El "vuelo Shein" se convierte, así, en una autopista aérea que refleja la nueva relación entre Argentina y China. Más allá de exportaciones e inversiones, esta ruta simboliza la llegada directa de productos a millones de argentinos, lo que refleja la intersección entre la globalización digital y la aviación comercial.

Fuente: Cronica